«Al primer palazo el Tata cae y ahí le empieza a pegar a matar», contó una de las sobrinas del Eduardo El Tata» Muñoz, sobre la brutalidad de los golpes y agregó: «Estaba como poseído con la pala en la mano. Se iba y volvía para seguir pegándole, a matarlo».

«Le colgaba el ojo y le seguía pegando, lo quería matar», añadió otro de los sobrinos de la víctima, cuyo estado de salud todavía es delicado. El joven destacó que su tío yacía en el suelo y explicó que el agresor le causó heridas en los pómulos, el maxilar y el cráneo. «Lo rompió por completo», resumió.

El implicado, según denuncia la familia de Muñoz, se encuentra a punto de quedar en libertad porque no se pudieron presentar pruebas contundentes en su contra. «No sabemos que va a pasar pero nosotros no vamos a dejar de movernos hasta que se haga Justicia», explicó el joven en diálogo con Crónica y sostuvo que cuando la familia le preguntaba al atacante por qué estaba agrediendo al Tata el agresor simplemente respondió: «No sé, pintó así».

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