La diputada del Frente de Todos, Susana González, repudió el espionaje ilegal desplegado durante el gobierno anterior y el funcionamiento del llamado Proyecto AMBA, que bajo la órbita de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) instaló seis bases en el conurbano bonaerense.


«Este es un capítulo más en la fatídica realidad que atravesamos con el espionaje ilegal en la provincia de Buenos Aires» dijo la legisladora al enumerar el accionar de los servicios de inteligencia que han quedado expuestos en la causa que tramita ante el Juzgado Federal de Dolores a cargo del Juez Ramos Padilla.

«Nos enteramos y vimos fichas realizadas sobre las investigaciones de los servicios de inteligencia a partidos políticos opositores, organizaciones políticas y sociales, familiares de las victimas del ARA San Juan, y a estudiantes secundarios» dijo González, por la nómina de quienes se encuentra señalados en ese expediente.

«Nada de lo que espiaron tenía algo que ver con la seguridad interior o la defensa nacional como establece la ley de inteligencia» dijo González, al citar las pruebas reveladas que se encuentran en el expediente y apuntó contra los legisladores que reclaman escuchar a la oposición y que cuando se tratan estos temas se llaman a silencio.

Al respecto, hizo hincapié sobre las responsabilidades del espionaje ilegal desplegado durante la gestión del gobierno anterior, y en particular a la ex gobernadora María Eugenia Vidal, quien «habilitó» la instalación de las seis denominadas “BASES AMBA” de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) utilizadas para «realizar tareas de vigilancia y seguimiento ilegal» en el conurbano bonaerense.

«A las tres sedes con las que contaba la Agencia en el territorio de la provincia de Buenos Aires, en las ciudades de La Plata, Mar del Plata y Bahía Blanca, y cuyo objetivo era la investigación de delitos federales complejos como el narcotráfico o la trata de personas, durante el gobierno de María Eugenia Vidal, fueron habilitados «seis bases de inteligencia en el conurbano bonaerense» en Morón, San Martín, Quilmes, Pilar, La Matanza y Ezeiza.

La diputada provincial, indicó que «A partir de esas bases, se creó la «Dirección de Reunión», a cargo del ex espía Pablo Pinamonti, que bajo un procedimiento de misiones y funciones tenía como objetivo asesorar a la dirección operacional, mantener actualizada la situación base de los componentes políticos, económicos y sociales, y planificar, dirigir y supervisar las actividades de reunión e información que se requieran de los factores de poder político».

«Esa dirección de reunión aceptada por la ex gobernadora, tenía además dos coordinaciones operativas para espiar a organizaciones sociales, esas mismas que siempre tuvieron como objetivo contener la red social sobre todo durante esos cuatro años donde la vulnerabilidad de los bonaerenses y las bonaerenses se acrecentó debido a las políticas neoliberales en materia económica» cuestionó.

Por último, la legisladora se refirió al ex presidente Mauricio Macri, quien reapareció en una entrevista televisiva «insidiosa y cuestionadora» donde le preguntaron si él había ordenado el espionaje ilegal y que negó evadiendo su responsabilidad, cuando todas las pruebas están documentadas.

«A veces es mejor permanecer callado y parecer un ignorante, que hablar y confirmarlo» cerro.

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