Una medida de fuerza de último momento por parte de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) dejará sin servicio de micros a miles de usuarios durante toda la jornada de mañana, martes 6 de mayo. La drástica decisión se tomó tras el fracaso de las negociaciones paritarias con las cámaras empresariales, luego de que venciera la conciliación obligatoria dictada por el Gobierno.
Desde la medianoche de hoy, se prevé la paralización total de más de 300 líneas de colectivos que circulan en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), incluyendo por supuesto a las que operan en La Plata, Berisso y Ensenada. La medida de fuerza también afectará servicios en el interior del país.
La falta de acuerdo salarial es el detonante principal de este paro. Según fuentes gremiales, la UTA reclama un aumento salarial que compense la creciente inflación y el deterioro del poder adquisitivo de los trabajadores del sector. A pesar de una reunión de urgencia convocada por el Ministerio de Trabajo para esta tarde, las expectativas de un acuerdo son bajas. «Si no hay una propuesta seria, el paro es inevitable», declaró enfáticamente Jorge Kiener, representante de la UTA, a un medio nacional.
La noticia ha generado gran preocupación e incertidumbre entre los habitantes del Gran La Plata, quienes dependen en gran medida del transporte público para sus actividades diarias, ya sean laborales, educativas o personales. Muchos se preguntan cómo harán para trasladarse mañana ante la falta de colectivos.
Este paro se suma a una serie de conflictos laborales que han afectado al sector del transporte en los últimos meses, evidenciando una tensión creciente entre los sindicatos y las empresas en un contexto económico complejo.