En 122 bis y 53 de Berisso, un hombre entró a las patadas en la casa de su expareja.
En medio de esa violenta situación, de acuerdo a fuentes del caso, le rompió un teléfono celular luego de arrojarlo contra el piso.
Desesperada, la víctima pidió ayuda y la Policía logró reducir al agresor minutos después. Se supo que tiene antecedentes y una restricción de acercamiento vigente.