El próximo miércoles, la Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal tomará la palabra para dar a conocer su veredicto final. El tribunal, compuesto por los jueces Mariano Borinsky, Gustavo Hornos y Diego Barroetaveña, deberá decidir si confirma la condena de seis años de prisión impuesta a Cristina Kirchner por administración fraudulenta o si le da la absolución o por el contrario, eleva la pena, como pidió la fiscalía, añadiendo el cargo de asociación ilícita y un posible incremento de la pena a 12 años de prisión.
La defensa de la ex presidenta pidió su absolución, alegando que las pruebas presentadas no sustentan los cargos. Además, la defensa había pedido la recusación del juez Gustavo Hornos, debido a sus vínculos con el expresidente Mauricio Macri, pero la Cámara de Casación rechazó el recurso, lo que deja despejada la vía para que el fallo avance sin mayores obstáculos.
El veredicto de la causa Vialidad no solo tendrá consecuencias legales, sino que también será un punto clave en la batalla política del país. Cristina Kirchner, presidenta del Partido Justicialista (PJ), sigue siendo la principal figura de la oposición, y su liderazgo es fundamental para el futuro del peronismo.
Por eso, muchos interpretan la condena en su contra como un intento de sacarla de la escena política y debilitar su rol dentro de la oposición, buscando reducir su influencia en el panorama político del país.