El domingo, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, llegó a Bahía Blanca, la zona más afectada por el fuerte temporal que ha cobrado la vida de 13 personas en gran parte de la provincia de Buenos Aires. En compañía del intendente Federico Susbielles, encabezó una reunión con autoridades provinciales y municipales para dirigir el Comité de Crisis ante esta emergencia.
Desde la noche del sábado, ha estado en comunicación con el jefe municipal bahiense y movilizó al ministro de Seguridad, Javier Alonso, quien llegó en la madrugada del domingo a la ciudad.
Además, Kicillof alertó a todos sus ministros, instruyéndoles proporcionar todos los recursos sociales, sanitarios y logísticos necesarios para abordar esta emergencia. En respuesta, se ha coordinado el traslado de camiones cargados con cientos de bidones de agua, 10.000 kilos de alimentos, 1.000 frazadas, 250 colchones, 500 kits de indumentaria y calzado, así como 500 kits de limpieza.
En sus declaraciones a medios locales, Axel Kicillof destacó los esfuerzos en curso para restablecer el suministro eléctrico y señaló que actualmente hay 700 personas trabajando en Bahía Blanca. Reconoció la gravedad de la situación en la ciudad y anticipó que la recuperación de algunos servicios llevará varios días.
Respecto al tema de la energía eléctrica, informó que las áreas del micro y macrocentro, que cuentan con cables subterráneos, podrían ser reparadas de manera inmediata. No obstante, en las zonas con cableado aéreo, el proceso de arreglo demandará más tiempo.
Adicionalmente, el gobernador indicó haber hablado con su ministro de Desarrollo Social, Andrés Larroque, para que envíe más camiones con suministros a Bahía Blanca.
Finalmente, Kicillof aseguró estar en contacto con el gobierno nacional y se encuentran evaluando las pérdidas. Hizo hincapié en el pedido a la población para que permanezca resguardada en sus hogares.