¿Qué querés ser cuando seas grande, bombero, cantante, futbolista, actor o piloto de acrobacias aéreas? ¿Qué habrá respondido Silvio Pettirossi a sus 7 años de edad cuando lo enviaron a Italia a estudiar? ¿Le habrán, al menos, preguntado?.
Nació en Paraguay y regresó a su país natal al cumplir sus 15 años, después de su paso por en el Liceo Militar en Europa. Desde esa edad, se incorpora al ejército paraguayo pero las idas y vueltas laborales lo traen a trabajar en Inmigraciones, a nuestro país.
En Argentina conoce a Jorge Newbery, aviador, deportista, funcionario, ingeniero y fundador de la Aeronáutica Militar Argentina. Newbery al darse cuenta de su capacidad y su gusto por la aviación, lo incentiva a irse nuevamente a Europa pero ya en busca de su vocación.
Decidido, elige Francia para comenzar su nueva profesión. País que desde 1910, contaba con la fábrica de aeroplano de quien va a ser su compañero de aventuras.
Se enamora de su Deperdussin y apenas empieza su carrera de piloto, comienzan sus hazañas, récords tras récords traspasaba todo lo pensado en acrobacias aéreas hasta la época.
La primera prueba fue la conocida como Looping the Loop. Hasta entonces nunca se habían logrado más de 6 giros. Pettirossi consagró en el primer intento, ¡37 giros! Otra de las más recordadas es un viaje de 760 km entre París y Burdeos con maniobras arriesgadas que realizaba sobre los pueblos que iba sobrevolando.
Silvio Pettirossi murió el 17 de octubre de 1916 durante un vuelo para verificar las reparaciones realizadas en su avión, en tierras de la familia Castells, en la provincia de Buenos Aires, a la edad de 29 años.
Ese día, soplaba un fuerte viento. Después de unos diez minutos de vuelo, Silvio hizo una señal a los que estaban en tierra para indicarles que todo iba bien y acto seguido, trepó a unos 1400 metros de altura e inició sus acrobacias.
Un tensor del ala izquierda cedió, golpeó la hélice y al quebrarse el ala izquierda el aparato empezó a caer en picada.
Al tocar el suelo, muere instantáneamente, acá en Ensenada, donde hoy se levanta la planta potabilizadora de agua, cerca del Fuerte Barragán.
El reloj que usaba se detuvo en el golpe exactamente a las 9:25 horas, momento en el que ocurrió este accidente fatal.
El monolito de la rotonda de ingreso a Punta Lara lo recuerda.
Aun que parezca increíble, al hacer una réplica de su aeronave para una exhibición, cien años después, en pleno vuelo de prueba se estrella.
¡Mirá lo que sucedió en el video!
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Gisela Dello Russo. @ VeoVeo__