Una intensa mañana se vivió hoy en Berisso luego de que dos individuos, uno de ellos menor de edad, fueran aprehendidos tras cometer una serie de tres robos en distintos puntos de la ciudad. La rápida acción policial, ordenada por el jefe de estación, culminó con una persecución en las inmediaciones del CIC del barrio obrero y un posterior tiroteo donde uno de los delincuentes resultó herido.

Según el parte oficial emitido por la Secretaría de Seguridad Ciudadana municipal, el primer hecho delictivo se registró alrededor de las 7:30 hs en una vivienda ubicada en las calles 167 entre 30 y 31. Los malvivientes forzaron el portón y una cadena del domicilio, sustrayendo una motocicleta marca Mondial Max 100 cc.

Acto seguido, utilizando el vehículo robado, los mismos sujetos perpetraron dos asaltos más. En las calles 11 y 152, intimidaron con un arma de fuego a una joven de 23 años, despojándola de su riñonera y su teléfono celular. Finalmente, en la intersección de las calles 30 y 167, abordaron a un transeúnte al que también amenazaron con un arma para robarle sus zapatillas y su móvil.

Ante esta seguidilla de robos, el jefe de estación dispuso un operativo cerrojo que permitió localizar a los sospechosos en las cercanías del Centro Integrador Comunitario (CIC) del barrio obrero. Al percatarse de la presencia policial, uno de los acusados apuntó con el arma de fuego a los efectivos, lo que derivó en una respuesta armada por parte del propio jefe de estación, Comisario Fernando Díaz, quien utilizó su arma reglamentaria.

En ese instante, ambos individuos intentaron escapar a pie por los pasillos de la zona, pero fueron finalmente alcanzados y aprehendidos por los uniformados. Durante el procedimiento, se constató que uno de los detenidos presentaba una herida de arma de fuego en su hombro izquierdo, por lo que recibió asistencia médica y se encuentra internado fuera de peligro.

La posterior identificación de los aprehendidos reveló que el mayor de ellos, Lencina Luciano Esequiel, de 18 años, contaba con antecedentes penales y un pedido de captura activo desde el pasado 5 de mayo. El menor de edad, por su parte, posee un alarmante historial de once antecedentes por diversos ilícitos cometidos en la ciudad.

Tras los hechos, la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) interviniente ordenó la preservación de los lugares donde se produjeron los robos para la realización de las pericias correspondientes y el secuestro de la motocicleta utilizada en los asaltos. Se iniciaron las actuaciones legales caratuladas como “Robos reiterados y lesiones”. Este nuevo episodio de inseguridad genera preocupación en la comunidad de Berisso y pone de manifiesto la necesidad de reforzar las medidas de prevención y control del delito en la región.

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