La figura de Fabián Cagliardi, intendente de Berisso y presidente del Partido Justicialista (PJ) local, se encuentra en el centro de las críticas y el malestar dentro del propio espacio peronista. Su notoria ausencia en las movilizaciones de apoyo a Cristina Fernández de Kirchner, presidenta del PJ Nacional, y su postura crítica hacia la exmandataria han generado un profundo quiebre y aislamiento político.
Mientras el peronismo nacional y provincial se movilizaba en respaldo a Cristina Fernández de Kirchner en un momento clave de su situación judicial, Cagliardi optó por la distancia. Lejos de participar en las marchas, el intendente berissense habría enviado a Buenos Aires a no más de 20 militantes, una cifra que, según fuentes cercanas a su gestión, ni siquiera fue suficiente para llenar un micro. Esta magra convocatoria contrasta fuertemente con el espíritu de unidad que se buscaba expresar desde el PJ.
La situación se agrava por las declaraciones públicas de Cagliardi. En un momento en que la condena contra Cristina Fernández de Kirchner era inminente, el intendente de Berisso criticó duramente su posible candidatura, sosteniendo que no debía postularse por la tercera sección electoral . Estas afirmaciones, de alto impacto, fueron rápidamente capitalizadas por periodistas antiperonistas como Eduardo Feinman y Jonathan Viale, quienes las utilizaron para desacreditar a la líder peronista. «El peronismo se le para de manos a Cristina», fue una de las frases que resonó en los medios, alimentando la narrativa de Clarín y La Nación. Según los cristinistas, «dándole de comer» a los sectores más críticos.
El descontento se extiende al ámbito interno del PJ berissense. En una reciente reunión, los propios aliados de Cagliardi le habrían solicitado la apertura del PJ local para realizar un «plenario abierto», un pedido que el intendente habría rechazado. La falta de un comunicado oficial por parte del PJ de Berisso en apoyo a Cristina Fernández de Kirchner, así como la ausencia de Cagliardi en reuniones con el gobernador Axel Kicillof y el PJ Nacional, profundizan la percepción de un liderazgo local aislado y sin sintonía con las bases del partido.
La distancia de Cagliardi resulta aún más llamativa al compararla con la actitud de otros intendentes como Mario Secco de Ensenada y Jorge Ferraresi de Avellaneda, quienes incluso han sido críticos de Cristina Fernández de Kirchner en el pasado, no dudaron en «bancarla» y marchar en su apoyo ante la difícil situación. Esta diferencia marca un quiebre significativo en la lógica de respaldo dentro del peronismo bonaerense.
Incluso la vicepresidenta del PJ local, cuya lealtad a Cagliardi no era cuestionada, hoy le responde con matices, manifestado su apoyo a la líder peronista, diferenciandose de Cagliardi.
Actualmente, la situación de Fabián Cagliardi en Berisso es de hermetismo y aislamiento. Con el PJ local cerrado y sin pronunciamientos oficiales, el intendente se encuentra, según observadores políticos y militantes, «aislado» y cada vez más alejado de las bases y la cúpula del peronismo… Veremos qué sucede en estos días.