Un nuevo y audaz hecho de inseguridad sacudió la tranquilidad del Barrio El Carmen en Berisso esta mañana, más precisamente de calles 129 entre 88 y 89, cuando una familia sufrió un intento de entradera a plena luz del día, un incidente que, según los vecinos, estaría vinculado a la escalada de violencia protagonizada por un conocido menor de edad que operaría armado en la zona.
El violento suceso, que tuvo lugar cerca de las 10:00 de la mañana y fue captado por una cámara de seguridad que muestra el momento exacto en que una mujer se dispone a subir a su vehículo estacionado en la entrada de una vivienda. De repente, un joven vestido con un buzo y blanco, con capucha, comienza a acercarse al coche, cuando el dueño de casa, al ver la situación, sale con un palo y pone al delincuente en fuga.
Éste incidente es solo el último de una seguidilla de hechos delictivos que tienen en vilo a los habitantes de El Carmen. La bronca e indignación vecinal se centran en un joven que, por ser menor de edad, habría sido detenido en varias ocasiones pero luego puesto rápidamente en libertad.
«Estamos cansados. Este pibe es conocido, ya tiene a todo el barrio atemorizado y anda armado como si nada,» aseguró una vecina, reflejando el sentir generalizado de la comunidad. Los reportes previos, incluyendo incidentes donde menores fueron aprehendidos por robos e incluso por resistirse a la autoridad con armas de fuego en la zona, refuerzan la percepción de impunidad que sienten los residentes.
Ante la creciente ola de robos y la percepción de que el delincuente se mantiene «al acecho» con total libertad, los vecinos de El Carmen lanzaron un enérgico llamado a las autoridades. Exigen una mayor actividad y presencia de las fuerzas de seguridad para frenar esta seguidilla de asaltos y garantizar la seguridad del barrio.
«La gente ya no puede vivir tranquila, salir a trabajar o dejar el auto un momento es un riesgo constante. Necesitamos que la policía y la Justicia actúen de verdad, que se tomen medidas efectivas para que este menor y otros que andan sembrando el terror no sigan en la calle,» manifestaron.
La situación pone en el centro del debate la necesidad de revisar los mecanismos de acción de las autoridades frente a los delitos cometidos por menores, mientras los vecinos de Berisso siguen siendo víctimas de una inseguridad que, lejos de disminuir, se vuelve cada vez más violenta y notoria a plena luz del día.