Los vecinos del barrio Cotilap padecen los resabios de una lluvia que apenas superó los 80 mm, pero que dejó calles inundadas y barro al por mayor.
Mientras los vecinos advertían sobre lo que podía pasar ante las primeras gotas de lluvia, ya que la falta de obras en el barrio es más que evidente y si bien el «relato oficialista» habla de progreso, la realidad sumerge a los vecinos en una problemática cotidiana.
Pero como venimos sosteniendo, «los relatos» caen por su propio peso y luego de dos días sin lluvia y con clima seco, éste día lunes, un camión recolector, debió ser asistido por una grúa, luego de quedar encajado en el barro.
«Te toman el pelo como si no supiera nada, pero las cosas pasan. El otro día pasamos fotos de autos que se cayeron, porque las calles no están bien».