Con un comunicado lanzado por las Redes Sociales, la encargada del área de Control Urbano, Gabriela Di Lorenzo, dió a conocer públicamente la sanción a la empleada Municipal que quedó «escrachada» en un vídeo, en dónde se la ve recogiendo un dinero que no le pertenecía, del sueño de una carnicería.
«Ante los hechos de público conocimiento, los cuales involucran a una inspectora municipal a mi cargo . Pongo en conocimiento, que la agente municipal fue suspendida en su función, en tanto se termine de evaluar y determinar, la sanción correspondiente» dice el comunicado que es ilustrado con la foto sonriente de la encargada.
«Es un momento muy difícil para la oficina en su conjunto . Por lo tanto , seguiremos tratando el tema con la seriedad y prudencia que esto amerita» finaliza el escueto comunicado.
Lo curioso del tema, es que si bien el accionar de la empleada es, al menos, reprobable, ésta gestión no tomó ninguna determinación ante hechos, también «reprobables» y públicamente denunciados de sus funcionarios, cómo el Director que llamó «Negros de Mier…» a los empleados del corralón municipal, o el Sub secretario cagliardista, Juan Pablo Holubiez, a quien se lo viralizó con una botella de champagne en una oficina del Palacio municipal, mientras una dama le gritaba «sacudila, sacudila…», entre otros casos.