La rica historia del Club Atlético Villa San Carlos se remonta a los albores del siglo XX, cuando la compañía “Bravo Barros” comenzó a dar forma al barrio que hoy late con pasión deportiva y social. En 1916, bajo el nombre de “Villa San Carlos”, se loteaban y vendían terrenos que, en realidad, pertenecían a los señores Marcelino y Rafael Herrera Vegas. Aquel incipiente vecindario pronto se convertiría en la cuna de una institución emblemática.
Fue en 1923 cuando la magia del fútbol infantil sembró la semilla de lo que vendría. Un grupo de entusiastas chicos, pateando una pelota en los terrenos baldíos ubicados entre las calles 2 bis y 3, y San Luis y Montevideo, decidieron formar un equipo al que bautizaron con un nombre tan pintoresco como su origen: “Avanti Barrilete”. Con el tiempo, sus juegos se trasladaron a la intersección de las calles 6 y 7, entre 1 y 2.
La camaradería y el espíritu deportivo de aquellos jóvenes trascendieron el simple juego. Reunidos en el taller de carpintería del recordado Don Antonio Velasco, decidieron dar un paso más allá. Así, en abril de 1925, formalizaron su pasión fundando el Club Atlético Villa San Carlos. La primera comisión directiva estuvo integrada por figuras clave como Antonio Velasco (Presidente), Raúl Casassa (Secretario), A. Flamini (Tesorero), y los vocales F. Génova, J. Maseroni y D. Vásquez.
Un año antes, en 1924, otro grupo de vecinos visionarios sentaba las bases de la “Liga de Fomento Villa San Carlos”. La primera reunión, celebrada en el almacén de Don Álvarez, contó con el unánime apoyo de la comunidad barrial. Inicialmente, la liga funcionó en un pequeño salón entre las calles 5 y 6 sobre la Avenida Montevideo, para luego establecerse en la esquina de la calle 7.
El crecimiento del club y la liga fueron de la mano, dejando un legado tangible en la ciudad. Dos hitos arquitectónicos marcan esta trayectoria: el emblemático Estadio Genacio Sálice, inaugurado el 25 de mayo de 1950 y ubicado en la calle 26 y 173, un verdadero templo para los amantes del deporte. Años más tarde, en 1968, se sumó la sede social en la intersección de la calle Montevideo y 25, un espacio de encuentro y desarrollo para la comunidad.
Hoy en día, el Club Atlético Villa San Carlos es mucho más que un recuerdo de aquellos pioneros. Con una activa vida social, la institución alberga a diario a más de 1000 deportistas que practican una amplia gama de disciplinas. Desde el dinamismo del Básquet y la elegancia del Patín Artístico, pasando por la pasión del Fútbol y la energía del Aerodance, hasta la disciplina del Taekwondo, la tradición de las Bochas, la concentración del Karate, la fuerza del Boxeo y la técnica del Jiu-Jitsu.
La historia de Villa San Carlos es un testimonio vivo del espíritu comunitario y la pasión por el deporte que han moldeado la identidad de Berisso. Desde aquellos juegos infantiles en los baldíos hasta convertirse en un centro deportivo y social vibrante, el club sigue siendo un orgullo para sus vecinos y un semillero de talentos en diversas disciplinas.