La suba del salario mínimo que determinó el Gobierno a finales de la semana pasada, muy por debajo de lo pedido por la CGT, implicará que perderá un 8% de poder adquisitivo entre mayo y octubre próximo. En tanto, la proyección de aumentos de los salarios privados también disminuyó en junio en un promedio de 11 puntos respecto al mes previo.
El viernes pasado, el Gobierno nacional aumentó por decreto Salario Mínimo, Vital y Móvil solo en un 15%, a pagar en tres cuotas. El nuevo piso salarial pasará de 234.315,12 pesos a 254.231 pesos para julio, escalando progresivamente a un máximo de 271.571 pesos en octubre.
Lo resuelto por el Gobierno, como era de esperar, prácticamente iguala lo pedido por la parte empresaria en aquel encuentro virtual: un salario mínimo de 254.000 pesos en julio, con un escalonamiento que llegara a los 264.000 pesos en octubre
En cambio, la CGT reclamó, en esa ocasión, un aumento que dejara al salario mínimo en 480.000 pesos en julio y en 505.000 pesos en agosto. Prácticamente el doble de lo finalmente otorgado por las autoridades.
Se trata, de hecho, del menor salario mínimo real desde, por lo menos, 1994, calculó un informe de Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (CIFRA) de la CTA de los Trabajadores.