El martes pasado a la madrugada, cuando un policía administrativo de La Plata salía de su casa en auto para cumplir con sus obligaciones laborales, lo interceptaron dos delincuentes armados, que lo bajaron del rodado con amenazas.
El hecho sucedió en la calle 67 entre 2 y 3 y duró apenas unos instantes en los que, afortunadamente, a la víctima no le hicieron nada.
Se trató de un oficial inspector, que inmediatamente se comunicó con el 911 para alertar del robo, al margen de que se tuvo que trasladar después a la comisaría a radicar la denuncia del caso.
Con esos datos, en el día de ayer, una pareja de efectivos que patrullaba las calles de Berisso, se percató de que el coche, un Peugeot 308 de color blanco, cuya sustracción informaron por la frecuencia radial, estaba circulando por su cuadrícula, en la zona de Villa Argüello.
La persecución se inició en ese mismo instante y terminó en las calles 14 y 134, donde el rodado impactó contra un pedazo de hormigón y queda frenado.