Las policías Federal y de la Ciudad reprimieron a los manifestantes que participaron de la concentración en la 9 de Julio convocada esta mañana por distintas organizaciones sociales, en reclamo de alimentos para comedores y merenderos, y en rechazo a la baja de beneficiarios del plan Potenciar Trabajo.
Durante más de 20 minutos los policías de infantería, los motorizados y identificados solo con chalecos celeste dispararon balas de goma, cargas de gases lacrimógenos y arrojaron gas pimienta a los manifestantes que los enfrentaron en la primera línea para cubrir a quienes trataban de escapar por la 9 de Julio y las avenidas y calles transversales.
En tanto, los de civil que se habían infiltrado en la marcha colaboraban con los agentes uniformados para concretar las detenciones. Durante esas persecuciones, varios manifestantes fueron golpeados ferozmente hasta quedar reducidos con las manos atadas con precintos plásticos.
El tramo de la 9 de Julio que va desde Belgrano hasta Avenida de Mayo fue un escenario de corridas, golpizas, y personas ensangrentadas y tiradas sobre el asfalto mientras eran golpeadas con trompadas, rodillazos y patadas de policías con y sin uniformes, atacando a manifestantes, periodistas y cualquiera que pasara por allí.