El hecho habría sucedido este fin de semana en Ensenada cuando un colectivo de la línea 275, que se encontraba con su capacidad al máximo y ya no tenía lugar, no frenó en una de las paradas de Punta Lara y una mujer junto a su pareja comenzaron a arrojar adoquines que terminaron destruyendo vidrios del vehículo.
Según el reporte hubo pasajeros lastimados y el chófer radicó una denuncia en la Comisaria de esa jurisdicción.
Mas allá del hecho injustificable, los usuarios se quejaban de la poca regularidad del colectivo y las pocas unidades que dispone la Empresa sabiendo la gran cantidad de usuarios que tiene por ésta época.