Mañana, miércoles 11 de junio, la provincia de Buenos Aires se verá nuevamente afectada por un paro docente que promete dejar a miles de alumnos sin clases y reavivar el conflicto salarial entre los gremios y el gobierno provincial. La medida de fuerza, convocada por los principales sindicatos docentes, busca presionar por una recomposición salarial urgente y mejores condiciones laborales.
La decisión de ir al paro fue tomada tras el fracaso de las últimas negociaciones paritarias, donde los gremios rechazaron la oferta del ejecutivo bonaerense por considerarla «insuficiente» y «alejada de la realidad inflacionaria». Los docentes argumentan que sus salarios han quedado significativamente devaluados frente al costo de vida, impactando directamente en su poder adquisitivo y la calidad de vida de sus familias.
«No podemos seguir perdiendo contra la inflación. Nuestros salarios no alcanzan para cubrir la canasta básica y eso es una realidad que el gobierno provincial no puede ignorar», expresó un referente sindical, anticipando una alta adhesión al paro. Los gremios también señalan la necesidad de mejoras en la infraestructura escolar y en las condiciones de salud y seguridad laboral.
Por su parte, desde el gobierno provincial han manifestado su «preocupación» por el impacto del paro en la educación pública y han reiterado su «voluntad de diálogo». No obstante, han señalado las limitaciones presupuestarias y la complejidad del contexto económico para satisfacer la totalidad de los reclamos salariales.
Se espera que el paro genere complicaciones en el normal funcionamiento de las escuelas en toda la provincia, con un alto porcentaje de inasistencia docente en los niveles inicial, primario y secundario. Las familias bonaerenses deberán organizar la jornada de mañana teniendo en cuenta la ausencia de clases, lo que generará diversas repercusiones en la rutina diaria de miles de hogares.
La jornada de mañana será clave para observar la magnitud de la medida de fuerza y cómo se desarrollarán los acontecimientos en este nuevo capítulo del conflicto docente en la provincia de Buenos Aires. La mirada estará puesta en las aulas vacías y en la posibilidad de una nueva ronda de negociaciones que permita destrabar la situación y garantizar el derecho a la educación.