Son 116 los trabajadores contratados por el Municipio en la modalidad Pasantes, con un sueldo de 17 mil pesos y una carga horaria similar a la de un trabajador municipal el cual cobra cuatro veces más.

Esta terciarización, que viene de vieja data y que Cagliardi, como otros políticos, criticó en su momento, termina siendo una de esas causas de promesas y eterna utilización de personas.

En ésta oportunidad, lo que generó el enojo y la reacción de los trabajadores y trabajadoras, fueron dos hechos, uno que incluye la mentira del Intendente, que se conocieron en las últimas horas.

La primera fue el «aumento ridículo» que les otorgó el ejecutivo, el cual en muchos casos fue de 341,25 pesos. Una suma irrisoria que no hace más que enojar a los empleados y empleadas que ven como la inflación les «comió» los 17 mil pesos de sueldo.

El segundo hecho lo involucra directamente al Intendente ya que mientras les dice, una y otra ves, que no puede tomar más personal en la Planta Municipal, ingresa a familiares y amigos.

Dicha situación disparó una retención de tareas que hoy tiene paralizadas a las dos guarderías Municipales y que además generó que desde otros sectores, también apunten contra el Nepotismo del Intendente.

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