El ladrón, amparado por la oscuridad de la noche, salía sigiloso de una vivienda situada en 21 entre 164 y 165, en Berisso, sin percatarse de que un vecino lo miraba con atención.
El frentista dio aviso rápido a la Policía que enseguida fue en busca del escruchante y lo atrapó a los pocos metros. Lo imputaron por “tentativa de robo por efracción”.
La víctima, en tanto, se encontraba de vacaciones.