Tras generar revuelo y una curiosidad inusitada en la región, la reunión internacional de los «Hells Angels» culminará su intensa semana de actividades en la zona con una parada en Berisso. Se prevé que la ciudad vecina sea el escenario de la despedida, a modo de broche de oro, de miles de motoqueros que han copado los hoteles y calles de La Plata y alrededores.

El misterio que rodeó inicialmente la masiva llegada de esta comunidad de motociclistas, con una insignia mundialmente reconocida y que no pasa inadvertida, ha dado paso a la confirmación de su agenda. Luego de la actividad central de ayer, que incluyó reuniones en el complejo «La Paloma» en Berazategui y en «El Peligro», la vista se posa ahora en el sábado.

Según se pudo conocer, los «Ángeles del Infierno» se congregarán en un complejo de la zona de Berisso para lo que será su encuentro de cierre. Marcelo Mazza, presidente de la filial argentina de la agrupación, confirmó la escala final: «Nos encargaremos de la logística y de acompañar a los aeropuertos», señaló, dando a entender que el evento del sábado servirá de previa al éxodo masivo que se espera para el domingo al mediodía.

A pesar de la reputación controversial que arrastra el club en otras partes del mundo —vinculada a conflictos como el tráfico de armas e influencias—, la visita a la capital bonaerense se ha desarrollado hasta ahora sin incidentes. Las fuerzas de seguridad, incluyendo la atención especial de Interpol, se mantienen en alerta, aunque hasta el momento el panorama es de calma y fascinación local.

Se estima que entre 3.000 y 5.000 motoqueros de todas partes del mundo —con representaciones de países tan diversos como Hungría, Tailandia, España y Grecia— arribaron a la Ciudad. Su llamativa presencia, con los icónicos chalecos de calavera sobre las motos «choperas» (principalmente Harley Davidson), no ha dejado indiferente a nadie, convirtiéndolos en los «rockstars» del momento.

La última actividad en la región concentrará a los ojos locales en Berisso. Mazza, al garantizar personalmente «que todo el evento va a salir de la mejor manera», busca disipar cualquier preocupación, destacando que el objetivo del encuentro es «celebrar y divertirse» dentro de una organización con 80 años de historia.

La ciudad de Berisso, conocida por su rica historia de inmigración y puerto, recibirá así a una de las comunidades motorizadas más grandes y enigmáticas del planeta, poniendo el punto final a una semana que, sin dudas, quedará marcada en la crónica local. El domingo, según el itinerario, la «fiesta» terminará con el traslado de los participantes a los aeropuertos, cerrando el «capítulo 2» de los «Hells Angels» en la región.

Vele señalar que el grupo «Hells Angels» nació a fines de los 60 en Estados Unidos, y aunque hoy es una franquicia global, mantiene una reputación que históricamente ha sido ligada a actos delictivos en algunas jurisdicciones. Sus integrantes locales insisten en su lealtad al club y el deseo de mantener un encuentro de camaradería.

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