A la deficitaria recolección de los residuos domiciliarios, se suman montañas de los no habituales ¿ Falta de pago a los contratados?
A mese de finalizar su mandato parece que el delegado Carlos Lozano tiro la toalla. Las montañas de basura crecen en cantidad de lugares y en volumen. Pese a continuar arrojando parte de lo recolectado, en el monte ribereño, lo cierto es que se agudizo enormemente la falta de recolección de los no habituales. Un caso insólito ser da frente a la sede de la delegación Zona 2 de nuestra ciudad. Esa esquina fue el lugar elegido por las autoridades para instalar un cesto de residuos, ya que varios vecinos de Los Talas no tiene servicio de recolección. El mismo era de pequeño porte y rebalsaba de bolsas los fines de semana. Por ello los frentistas que residen a pocos metros lo quitaron.
Para subsanar la situación, con buen tino, Lozano gestiono la instalación de volquetes (2), desde los cuales, cada mañana se pasaba la carga a los compactadores correspondientes. Pero hace un par de semanas la realidad cambio drasticamente. Lo que había resultado un ordenador, hoy queda rodeado de basura, colchones viejos, hierros y todo lo que se pueda imaginar, brindando una postal propia del subdesarrollo.
Pero no es el único lugar donde se juntan los no habituales a la espera de ser recogidos . Otro punto es la esquina de 42 y 172 que se encuentra a pocas cuadras de la delegación municipal. El panorama se repite por decenas de lugares a lo largo del territorio de Berisso. Lo extraño que la gestión de Jorge Nedela tiene contratados a decenas de camiones y cooperativas para hacer esta labor. Existe un atraso importante respecto al pago del servicio, por ello no seria descabellado que varias unidades se desvinculen del municipio, ya que las posibilidades de cobro son cada vez menos.