Mientras Berisso está en cuarentena y duerme en la extraña tranquilidad de la noche, cerca de la una de este día lunes, la ciudad es visitada por un extraño ser que llama la atención de algunos vecinos con insomnio y de la gente del COM que vigila las cámaras. Como si la Avenida Montevideo y su vereda les perteneciera, una nutria se paseaba por la arteria principal de la Ciudad a la altura de la calle 20 Este.
Sorprendidos e inquietos vecinos y trabajadores Municipales dieron el alerta a la guardia de Defensa Civil, quien se acercó hasta el lugar, acorraló al animal, lo atrapó y lo llevó hasta la zona del terraplén Costero donde lo liberó.
Éste tipo de situaciones comienzan a repetirse en distintos puntos del mundo donde se realiza la cuarentena, dado que la misma, está haciendo que la vida Silvestre vuelva a ganar un espacio que por derecho propio le pertenece y que el ser humano jamás respeto.
Por eso no es extraño, que ante la falta de personas, la nutria fuera tomando confianza y llegara desde el Monte Ribereño hasta la Avenida Montevideo, solo para pasear un rato.