Franco Colapinto hizo historia en Bakú: terminó octavo, sumó de a cuatro en la categoría reina y permitió que la Argentina vuelva a ganar puntos por primera vez después de 42 años. Aunque fue el primero en cambiar los neumáticos, la estrategia que trazó con Williams le permitió mantenerse décimo en gran parte de la carrera y, un choque inesperado entre Checo Pérez y Carlos Sainz en la vuelta 50/51 le dio la posibilidad de avanzar dos lugares sobre el final.
«Me da mucha felicidad por el equipo, porque sé el trabajo que hicieron. En mi segunda carrera estar con los dos autos en los puntos no lo esperábamos y es muy, muy positivo para el equipo. Con la confianza que pusieron en mí, de ponerme en esta butaca, les estoy demostrando que puedo tener buenos resultados, andar igual de rápido que Alex y que estamos muy parejos. Ilusiona mucho al equipo de cara al futuro y me pone muy feliz», aseguró el piloto en diálogo con ESPN.
«Estoy muy feliz por el octavo puesto, es un sueño hecho realidad. Este fin de semana fue increíble. La estrategia de Alex era más rápida, fue con las gomas duras hasta más tarde y las medias sufrían mucho con la temperatura del inicio de la carrera, por eso era ideal ponerlas al final, pero era más arriesgado por si había un safety car al principio. Controlé bien las medias al principio y luego las medias, cuando empecé a apretar, así que estoy contento con el resultado».
A su vez, se mostró sorprendido por el resultado que obtuvo. «Fue una carrera muy positiva, no sé si esperaba llegar en los puntos. Teniendo a Lewis atrás, pensábamos que iba a ser muy complicado, pero tener a los dos autos dentro del top 8 es una locura y me pone muy feliz. El equipo hizo un trabajo increíble este fin de semana, arregló el auto que rompí en la FP1 y dio sus frutos. Es sólo el comienzo, mi segunda carrera, y van a venir muchas más. Contento por cómo empezamos, es un gran comienzo y nos deja muy ilusionados para lo que viene», reconoció.
Del mismo modo, Colapinto recordó qué sintió cuando notó que Lewis Hamilton lo escoltaba. «Cuando lo vi detrás, dije ‘voy a tratar de mantenerlo detrás, aunque no sume puntos ya es un logro’. Al final pude, así que muy feliz», reconoció.