La Costa Atlántica es uno de los destinos más elegidos por el
turismo para pasar las vacaciones de verano . Hay numerosas playas en donde disfrutar de la arena y el mar. Mar del Plata es sin dudas el sitio donde mayor concurrencia de turismo en vacaciones, y hay otros lugares como Mar de Ajó, Mar Chiquita, Miramar o Necochea, sólo por mencionar algunas de las playas más concurridas.
Cada una tiene sus atractivos en lo cultural, deportivo, actividades recreativas, paseos, pero principalmente la gastronomía, donde hay comidas de todos los precios y para todos los gustos.
Pero hay un destino muy particular, elegido por el turismo de alto poder adquisitivo y donde siempre se genera controversia con los precios de la gastronomía. Los veraneantes que visitan esta ciudad lo hacen porque tienen propiedades blancas en esas playas rodeadas de pinares con arenas que invitan a disfrutar de la tranquilidad, lejos de los ruidos de la ciudad.
Se trata de Pinamar , cuyas playas reciben a los visitantes con novedades cada año, como la pasarela recientemente inaugurada desde la calle Langostinos hasta Avenida De Las Artes y se extiende aproximadamente unos 350 metros lineales conectando con los sectores de paradores.
Más alla de las bondades y belleza natural que ofrece Pinamar , los precios de la gastronomía siguen generando malestar entre los turistas que eligen este destino para pasar las vacaciones de verano. Es que en un balneario céntrico, el costo de las comidas ha provocado por estos días de enero una fuerte indignación por sus elevados precios.
Una consulta realizada durante los primeros días del nuevo año, ha puesto los pelos de punta a muchos veraneantes que han tomado como un abuso de los altos precios de algunas comidas. A modo de ejemplo, una ensalada con mix de verdes, fruta de estación, queso bocconcini, garrapiñada y miel de maracuyá tiene un precio de $15.000, mientras que una pizza de mozzarella, algo tan simple de preparar, cuesta $17.000.
En lo que respecta a bebidas, una gaseosa de litro y medio se vende a $2.500, que en comparación con otros puntos del país tiene un alto costo.
Otras opciones de comidas para consumir cerca del mar, incluyen una picada de mar, que consta de fish & chips, rabas y langostinos con panko, a $21.000, mientras que una hamburguesa doble con queso cheddar y tocino cuesta $14.000.
Hay muchas comidas típicas que reflejan la tradición argentina, pero hay una que distingue del resto. Son las empanadas de carne, cuyo precio por docena ha provocado la mayor sorpresa del verano en Pinamar . La docena de empanadas de carne en este parador céntrico cuesta $24.000.