Los almaceneros de la provincia de Buenos Aires están enfrentando una situación alarmante debido a los constantes aumentos en los servicios de agua y electricidad.
Con cifras que en muchos casos superan el millón de pesos, los almacenes y supermercados afectados deben asumir un nuevo gasto en medio de una profunda crisis y una caída en el consumo.
Fernando Savore, vicepresidente de la Federación de Almaceneros de la Provincia de Buenos Aires (FABA), quien describió la situación de los supermercados del AMBA, los aumentos que deben enfrentar y las subidas de precios de los últimos meses. «Lo que hemos recibido son boletas con aumentos del 300% o 400%. Tengo un comercio de 92 metros cuadrados y pagaba 97 mil pesos de luz, ahora pago 238 mil. Colegas me han enviado facturas donde pagaban 120 mil y ahora pagan 400 mil. Esta es la segunda factura que llega con el cambio de precios», señaló Savore.
«La cuestión es cómo afrontamos este nuevo gasto. Notamos que el día 15, fin de mes, sentimos profundamente la caída de ventas. Comenzamos a trabajar a partir del día 5, ya que la gente cobra el día 1. El resto del tiempo es solo subsistir». Respecto a los aumentos de los servicios, añadió que no solo se han visto afectados por el incremento en los precios de la luz. «La energía eléctrica es solo uno de los factores. Tengo un colega que pagaba 7 mil pesos de agua y ahora paga 50 mil. Es un aumento tras otro, además de los impuestazos en todos los municipios», comentó.
¿Cómo afectará esto al consumidor?
Savore explicó que, a pesar de estos aumentos en los servicios, los almacenes están entre la espada y la pared: deben afrontar los gastos con sus ingresos actuales o aumentar los precios, arriesgándose a perder más ventas. «Esto se discutió en diferentes cámaras. Si aumentamos los precios, salimos del círculo de la competencia. Competimos constantemente con los hipermercados y no podemos cambiar los porcentajes. Si nuestros precios son más altos, las ventas caerán aún más».