Su nombre es Rodolfo Rivero y asegura haber vivido un «verdadero infierno», luego que el último día sábado, cerca de las 17 hs, la policía irrumpió en su casa de calle 32 y 166, dónde en el marco de una causa por robo, pero sin orden de Allanamiento, le dieron vuelta la vivienda, le secuestraron varios elementos de su propiedad y hasta denuncia que fue golpeado por dos policías.
Dentro del Relato que hizo la víctima en la mañana de Radio Sur 105.1, para el programa Infoberisso Radio, el vecino de Barrio Obrero dió detalles casi escalofriantes; «ya en la casa me empezaron a golpear. Me daban piñas en la cara. Mandaban al testigo al fondo y dos policías me golpeaban y me preguntaban si tenía plata y si tenía cámaras» contó el vecino.
«Lo primero que me preguntan es por el cuatriciclo, el cual le muestro, junto con los papeles que muestran que se lo compré, en cuotas, a un amigo que lo tenía tirado y sin usarlo… Es más, les dije que estaba desarmando porque lo estaba arreglando ya que estaba chocado» contó la víctima, quien agregó, «además buscaban un cuatriciclo de un color distinto al mío».
En la nota, Rivero, continúa el relato contando; «yo les decía que era mío y me hacían callar. Me sacaron una pava eléctrica, unos parlantes, los celulares, dinero y hasta un alargue, entre otras cosas que ni figuran en los papeles… También se querían llevar el televisor, pero como los vecinos se empezaron a juntar, me subieron al patrullero y me llevaron a la Comisaría Segunda, dónde me vuelven a golpear y me meten en un «buzón», lugar que conozco por primera vez porque jamás estube metido en nada, ni había pisado una comisaría»
«Cuando me llevan a Cuerpo médico, por temor no digo nada. Es más, los que me llevan son los que me golpearon, imaginen que si digo algo cuando volvía a la comisaría no sabía que iba a pasar… Al rato es que puedo hablar con mi abogada y luego vamos a tribunales y declaré, con lujo de detalle todo lo que pasó, cuando, dónde y a quien le había comprado las cosas y el ayudante del juez se agarraba la cabeza. Finalmente me dieron la libertad, después de dos días de pesadilla total, en dónde no sabía que les pasaba a éstas personas»
Rivero contó también que hoy en día hay un caso similar con un vecino por el cual la familia está pidiendo justicia, «Yo no solo estoy poniendo la cara por mí… Me amenazaron me dijeron que me iban a agarrar en la calle, que me iban a armar otra causa y no me importa. Yo no quiero que ésto le pase a más nadie, que no agarren «peregiles»…
Hoy mi familia está traumada, mis hijos no quieren venir en el auto conmigo por temor a que la policía les haga algo, mi mujer está con temor, yo mismo escucho pasar una camioneta y me asomo a la ventana… Es una pesadilla todo ésto» contó el hombre.
Un detalle más que trascendió, es que la dueña del cuatriciclo robado, no habría reconocido el vehículo secuestrado a Rivero como el suyo, dejando aún más endeble la causa armada por efectivos de la Comisaría Segunda.