Es sabido que más allá de lo que intenta mostrar el Intendente de Berisso, Fabián Cagliardi, expresando una política dónde su imagen es predominante y única, siempre a necesitado de laderos políticos que refuercen esa materia que evidentemente desconoce y lo lleva a cometer errores.

En un principio esa «pata política» le fue brindada por la alianza que sostenía con la edil Vanesa Queyffer, quien era la encargada de generar los vínculos, tanto con otros espacios políticos, como con los frentes sindicales y la gente.

Pero la ruptura entre las partes lo llevó a la creación de un espacio propio conformado por sus «Ultras», una especie de Opus DEI político, encabezado por el «Champions League», Martín Fernández, que se encerró en los propios costando le una mala primera vuelta electoral en las PASO del 2020.

En vista del «algo hay que hacer», es que Cagliardi forjó una Alianza con un viejo amigo; Enrique Slezack, quien rápidamente ordenó a «Los Cardenales» hacerse cargo de la campaña, tomando un viejo camino desconocido por las huestes ultra Cagliardista, «la militancia barrial», lo cual le hizo ganar un poco de espacio.

Ese esfuerzo de «los Cardenales» no era gratis, la posibilidad de volver a tomar impulso político era clara, pero para ello la necesidad imperiosa de tener cargos se hacía menester y allí apuntaban.

Pero nadie le enseña trucos de negociación a un empresario y pasadas las PASO, Cagliardi no cedió lugares y el «operativo regreso» se quedó estancado y generó fricciones.

Las visitas del ex Intendente y su gente al edificio de calle 6 y 166 se fueron haciendo más esporádicas, retomando los ultra Cagliardista la «manija» de los aspectos políticos.

Todo eso fue «Hasta ahora» porque las cosas «no andan bien» aseguraron desde el Palacio municipal; «No hay vínculos para arriba y no hay señales para abajo… Quique está enojado porque ni el puesto del hijo le dieron y había que encontrar a alguien y apareció Juani» relata el funcionario.

Lo cierto es que uno de los que ya se habría instalado cerca del Intendente es el Neo funcionarios, Sebastián «Chicho» Mincarelli, quien acaba de salir de su banca de edil y fue derecho al Ejecutivo, en dónde su hermano Juan Ignacio, ya le había allanado el camino.

Recordemos que ya públicamente «Juani» había dado entrevistas en dónde se había manifestado como un Cagliardista de primera línea y hoy ya abiertamente es el nuevo «socio político».

Por los pasillos de 6 y 166 ya corre el rumor; «es el heredero… Fabián le prometió que después de él va Mincarelli»

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