Una obra abandonada por el municipio desde hace cuatro meses, condiciona la vida de los vecinos que ya no saben donde buscar respuesta
Pese a que las obras de bacheo son uno de los caballitos de batalla en la campaña del actual intendente, la realidad indica que se trata de otra mentira más. Bastará con preguntar a los vecinos de la calle 17 entre 155 y 156 que piensan sobre la gestión en 0bra pública local. La calle 17 fue rota por un martillo neumático en varios tramos de su recorrido, con el argumento que luego se repondrán dichos paños de hormigón.
Pero el colmo de la desidia tiene su epicentro a mitad de cuadra donde sin señalización alguna, un talud de tierra de unos dos metros de altura ocultan la pileta de agua podrida formada en media calzada. INFOBERISSO diálogo con los frentistas quienes aseguran que ya hubo varios accidentes, cuando los automovilistas se encuentran con una montaña en la mitad de la calle.
El piletón verde y maloliente tiene unos 4 metros de ancho por 15 de largo y unos 40 centímetros de profundidad. Consultados sobre si realizaron algún reclamo, los mismos aseguran que en reiteradas veces pidieron explicaciones ante las autoridades municipales. En principio, la obra se paralizó por una abultada deuda que mantenían con la hormigonera. En otra oportunidad acusaron a la empresa que realizaba las tareas que cometió un error, el pozo debía ser unos metros más adelante.
Lo concreto que es otra obra más sin terminar de la dupla Nedela-Murgia. En tanto un vecino que posee un taxi con el cual se gana la vida, hace 4 meses que debe dejarlo en la vía pública con el riesgo que significa, ya que tiene vedada la entrada a su propio garaje por desidia municipal. Un desvencijado cartel tan antiguo como el comienzo de las tareas reza «disculpe las molestias, estamos trabajando para vivir mejor»…
