La lluvia le jugó una mala pasada a las autoridades de algunas escuelas, sus alumnos y sus padres.
Detrás de las condiciones climáticas que se sucedieron el ultimo jueves y viernes, se produjeron innumerables inconvenientes; calles anegadas, falta de transporte que permita a las familias asistir a los actos de egresados , y un estado edilicio de los establecimientos educativos que lejos de haber mejorado en éste 2018, empeoró y en el mejor de los casos, continuan igual.
El caso de la escuela de educación secundaria 1, es emblemático, ya que se encuentra gestionando hace dos años la reparación del techo del salón de actos, y actualmente a pesar de los reclamos, cuando llueve debe ser inhabilitado por la cantidad de filtraciones.
Industrial y otras Escuelas Primarias, tal el caso de la Escuela 17, también sufrieron la misma suerte y en aquellos que los Directivos decidieron no postergar, el acto se realizó en espacios muy reducidos, como en la Escuela Agraria, en donde la bandera de ceremonia no pudo ser levantada por su portador ya que tocaba el techo.
27 millones de los 54 millones que llegan como Fondo Educativo, son los que se debían gastar en las Escuelas.
PRECIOS INFLADOS, obras a medio hacer y la ausencia total de un Consejo Escolar comandado por «La Patrona», Elizabeth Franchi, son nuevamente la noticia, como a principio de año, EGRESAMOS DE LA DESIDIA.