Un llamado de alerta de un vecino de Berisso desencadenó un operativo policial que culminó con la aprehensión de tres menores de edad en la intersección de la transitada avenida Montevideo y la calle 46. El motivo: un presunto robo en una vivienda que dejó un considerable número de objetos faltantes.
Según la información proporcionada por la Secretaría de Seguridad Ciudadana municipal, el Comando de Patrullas actuó con celeridad tras recibir la denuncia del damnificado. La rápida identificación de los sospechosos no tardó en llegar. Los agentes interceptaron a los tres jóvenes, cuyas edades oscilaban entre los 14, 16 y 17 años, mientras transitaban por la mencionada arteria portuaria portando dos voluminosas valijas.
La sorpresa llegó al requisar el contenido de las valijas. En su interior, se encontraron una variedad de elementos que fueron inmediatamente reconocidos por el vecino denunciante como propios, confirmando así las sospechas iniciales.
El inventario de los objetos recuperados es extenso y diverso, revelando el alcance del presunto robo: un par de botas texanas negras, un reproductor de DVD Admiral plateado, un amplificador Pioneer negro, un jean azul y, llamativamente, once juegos para la consola PlayStation 3, acompañado de un joystick negro. A la lista se suman un mouse negro, una cámara fotográfica, un parlante Philips, una cuchilla de mango negro, dos valijas (una grande negra y otra de marca no especificada), dos hidrolavadoras Gamma (sí, ¡dos!), dieciséis manojos de cables varios, un reflector negro, un inflador negro, dos camisas de trabajo, cuatro destornilladores, dos llaves (una del número 10 y otra de ¾), una lima, dos cortafierros, cuatro pinzas, un generador de corriente negro, una potencia de audio, un ecualizador y, finalmente, una estufa eléctrica.
Tras el hallazgo y la confirmación de la propiedad de los objetos, los efectivos policiales procedieron a la aprehensión e identificación formal de los tres menores. Fueron trasladados a la dependencia policial, donde se dio intervención a la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) del Joven.
La decisión de la justicia fue clara: se dispuso el inicio de actuaciones bajo la carátula de “Robo y encubrimiento”. Sin embargo, dada la minoría de edad de los implicados, la resolución final fue la entrega de los tres adolescentes a sus respectivos padres, quienes ahora deberán hacerse responsables de las acciones de sus hijos.
Este episodio pone de manifiesto la problemática de la delincuencia juvenil en la región y la compleja tarea de las autoridades para abordar este tipo de situaciones, donde la ley busca un equilibrio entre la sanción y la protección de los derechos de los menores.