Luego de la repercusión que obtuvo una nota de éste medio, en la cual, los vecinos, hablaban de «una villa» en el balneario Palo Blanco; efectivos de las fuerzas de seguridad procedieron, ayer, a desalojar la playa.
Según trascendió, la orden de desalojar el lugar habría surgido desde el propio Intendente Municipal, Fabián Cagliardi, quien luego del escándalo generado ante la situación de los vecinos, quienes llegaron a afirmar que había robos por parte de los acampantes, hoy decidió el desalojo.
Si bien aún no trascendió ningún informe oficial, vecinos de Palo Blanco afirmaron que «más allá de algunas quejas» de los «acampantes», todo se dió sin disturbios de consideración.