La ciudad de Berisso conoció hoy la triste noticia del fallecimiento del Dr. Oscar «Didi» Colombo, una figura que representó durante décadas el compromiso humano y la vocación de servicio en su máxima expresión. Su partida física genera un profundo dolor en una comunidad que lo adoptó como «Médico del Pueblo», título ganado en la calle, en los barrios y en los hogares donde su presencia llevó sanación y consuelo.
Ejerció la medicina con una entrega que hoy parece de otra época, siendo el prototipo del médico de cabecera que conocía no solo la dolencia del paciente, sino también su historia familiar, su situación laboral y sus preocupaciones más profundas. Su práctica profesional se destacó por un humanismo basado en la capacidad de escucha y una empatía que convertía cada consulta en un acto de solidaridad.
Con una presencia territorial constante, atendió a generaciones de berissenses sin importar hora o capacidad de pago, anteponiendo siempre la salud de sus vecinos a cualquier interés personal.
En el ámbito institucional, Colombo desempeñó roles fundamentales para el crecimiento de la ciudad. Fue Director del Hospital Zonal General de Agudos «Larrain», donde dejó una huella imborrable por su gestión y su defensa inclaudicable del hospital público. Asimismo, participó activamente en el Colegio de Médicos y en diversas organizaciones civiles, buscando siempre elevar el estándar de la atención sanitaria en toda la zona.
Su vocación de servicio también se trasladó a la vida pública con un corazón profundamente justicialista. En el plano político, fue un referente indiscutido del Partido Justicialista de Berisso, donde su militancia nunca fue discutida, vinculando siempre la acción social con su rol de médico.
Como Presidente del Consejo del Partido, trabajó incansablemente por la unidad del movimiento en momentos de fragmentación, convirtiéndose en guía para sus compañeros.
También desde su banca como concejal en el Honorable Concejo Deliberante, se destacó por impulsar proyectos vinculados a la salud pública, la mejora de los barrios periféricos y la defensa de los derechos de los trabajadores de y del polo industrial.
Fue reconocido por propios y ajenos como un gran unificador, tanto es así que logró ser Presidente del cuerpo, un hombre capaz de dialogar y lograr consensos incluso con sectores opositores en pos del beneficio de su querida ciudad.
Con la partida de «Didi» Colombo, Berisso pierde otro referente de la vieja escuela que supo caminar las calles y barrios de la ciudad. Sus restos serán despedidos por una comunidad que hoy llora a un hombre, pero que mantendrá vivo su legado en cada rincón del hospital, del partido y del Concejo Deliberante.