Cómo funcionan los esquemas piramidales, como el Telar de la abundancia


En los últimos días se viralizó un tipo de engaño conocido como “Telar de la abundancia”. Se trata de un esquema piramidal, que les promete a los miembros una rentabilidad que podría sextuplicar la inversión inicial.

Los miembros, si logran a la vez reclutar gente, crecen en la pirámide hasta alcanzar el rol más alto (o el centro de toda una red), desde donde obtendrán la ganancia. Ese dinero, en rigor, viene de los nuevos ingresantes que pagan para entrar a la pirámide con la misma expectativa: multiplicar el dinero invertido. Por eso, el éxito del camino dependerá exclusivamente del reclutamiento y el convencimiento para que nuevos actores se sumen a la causa.

Pero el éxito será sólo para algunos: el problema es que no hay ninguna inversión o actividad que genere ingresos, más que la llegada de los nuevos miembros de la comunidad. Y entonces, la promesa original quedará trunca apenas se corte el ingreso de nuevos participantes y su dinero. Además, a diferencia de una inversión en una institución financiera autorizada, no se firma ningún tipo de documento ni hay solvencia para responder ante un eventual resultado negativo.

Por estos días, el “Telar de la abundancia” adopta diferentes nombres: “Telar de los sueños”, “Mandala de la abundancia”, los “Círculos de la prosperidad”, “Flores de la abundancia”, “Fractal” y “Ruedas de la amistad”.

El esquema piramidal no es nuevo: nació en los Estados Unidos de manos de un empresario italiano conocido como Carlo Ponzi. “En estos esquemas hay alguien que ofrece retornos o beneficios por “inversiones” secretas o misteriosas. Este inversor, o más bien estafador, organiza y convoca a incrédulos que recurren a él esperando tener beneficios que superan con creces los de mercado. Pero en la realidad no paga con intereses o dividendos, como dice, sino con el propio capital de los nuevos inversores, y así, cuando no hay nuevos incrédulos, el sistema se derrumba, se insolventa y colapsa”.

Las redes para ingresar al telar

Los nuevos ingresantes al “telar” deben aportar dinero (que puede ir de los 1000 pesos a los 1440 dólares), Con la promesa de “cumplir sueños”. Un mensaje que circula por Whatsapp, un canal fundamental en el reclutamiento, lo explica así: “Te quiero contar que formó parte de un grupo de economía solidaria, que consiste básicamente en dar y recibir😁 Este grupo se llama “fractal” y es un movimiento internacional, que fomenta la solidaridad, el apoyo y la abundancia.🤗 Todo se trata de vibrar alto 🔝y juntos ayudarnos a tener la certeza de que somos merecedores y que SI podemos cumplir nuestros sueños 💫y nuestros objetivos.💯”, señala.

Cómo funciona el fractal

Cuando la persona entra es “fuego” (el nombre varía según el esquema), de los cuales hay ocho y son quienes están a cargo de buscar nuevos miembros para escalar en la estructura. Cuando logran que entren más personas, pasan a ser “viento” (cuatro integrantes), luego “tierra” (dos miembros) y, finalmente -si siguen ingresando nuevos participantes por debajo- llegará a ser “agua” (solo uno). Aquí es cuando recibirá su “regalo”, que dependerá de los “costos” de ingreso en la red: lo que pagan los “fuego”.

“Este proceso es dinámico, y los tiempos generalmente se cumplen en una semana. Funciona porque juntos lo hacemos funcionar, damos lo mejor de nosotros y así alcanzamos nuestros objetivos personales y grupales”, explican en otro chat. En todo el proceso son clave los grupos de Whatsapp y los encuentros donde “nos apoyamos, nos divertimos y aunamos energías”.

Por qué es un engaño

Este tipo de maniobras tiene “posibles consecuencias perjudiciales para el patrimonio de parte de los participantes”, explica la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (PROCELAC).

En rigor, el esquema, con sus diferentes eslabones, se mantiene gracias al ingreso de nuevas personas (de nuevos fuegos). Pero apenas deja de entrar gente, se cae toda la estructura. En ese interín, hay algunos que ganaron dinero; pero la mayoría no percibirá los montos prometidos.

La variante “feminista”

Desde la Defensoría del Pueblo de la Ciudad aclararon que “hay que tener en cuenta que no se trata de una “estafa feminista” sino en todo caso de un engaño que hace uso del lenguaje del feminismo, con palabras como ‘sororidad’ o con la apelación a ayudarnos entre mujeres, por ejemplo, para que las mujeres se sientan interpeladas”.

En este sentido, “el telar de los sueños”, el “Mandala de la abundancia”, los “Círculos de la prosperidad”, “Flores de la abundancia” y “Ruedas de la amistad” tuvieron en el último tiempo una forma llamativa de reclutamiento: la que invita a empoderarse como mujeres” que circula por Whatsapp. “Hola chispita poderosa. Si mirás este video es porque una amiga tuya confió en vos y ve tu potencial de mujer empoderada. Me tejí tres veces, me fui dos veces al Caribe, una vez a Europa, me compré todo el material deportivo para escalar (…) Más allá de los regalos económicos, el regalo son las mujeres que vas conociendo, el empoderamiento, el creernos y darnos cuenta que somos capaces de hacer lo que queramos y lo que nos propongamos”.

La Defensoría explicó  algunas formas de protegerse: “Recomendamos ante una propuesta semejante, consultar con distintas organizaciones de mujeres, feministas y distintos organismos que trabajen cuestiones de género para recibir asesoramiento. La defensoría cuenta con un área de género para estas y otro tipo de consultas en que las mujeres vean afectados sus derechos”.

Fuente chequeado.com

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