Si hay algo que el «macrismo» ha hecho a la perfección es meterse de pleno en los ciudadanos con «relatos» que lejos estaban de la realidad. Con la ayuda de los medios «cómplices», la gestión NEDELA, ha producido varios hitos en la materia; «LAS PLAZAS DISNEY», «LOS PERUANOS QUE ROBABAN TRENES», «LA TRANSPARENCIA», «LOS CIEN EMPLEADOS ÑOQUIS», «LOS MUNICIPALES VAGOS QUE GANAN 65 MIL PESOS» y otro cúmulo de mentiras.
Terminado el poder macrista en Berisso, estos montajes de la realidad, comienzan a quedar al descubierto y la verdadera cara de «LA PEOR GESTIÓN DE LA HISTORIA DE BERISSO«, empieza a aparecer de una manera tajante que deja en ridiculo a los ex funcionarios y sus «relatores».
En ésta pelea que inició el Ejecutivo del Ex Intendente JORGE NEDELA en contra de los trabajadores municipales, uno de los sectores más apuntados fue la DELEGACIÓN 2 de Santa Teresita, que comandada por los funcionarios LOZANO y SANZ, solían culpar a los empleados por la falta de acción y la impericia propia.
Pero como quedó dicho, toda careta se cae más tarde o más temprano y la asunción del nuevo equipo de Gobierno comandado por el nuevo Alcalde FABIÁN CAGLIARDI, le dio a los trabajadores del lugar, un impulso y un ánimo nuevo que se ve reflejado en acciones concretas.
Como ejemplo de lo antes mencionados, ésta semana y por iniciativa de los propios trabajadores Municipales, fueron reacondicionados y pintados varios sectores del edificio; «fuimos a los comercios de la zona y pedimos pintura y otros elementos y nos pusimos a pintar y arreglar todo… la nueva administración nos da tranquilidad, cambió el clima tenso que se vivía, no hay persecución y sobre todo existe diálogo y trabajo en conjunto, ya que el Delegado NELSON SPAGNOLO, trabaja como uno más, entendiendo las necesidades de nosotros y no, como hacían los otros, poniéndose siempre por encima, mirando por arriba del hombro y denigrando al empleado…» relato un municipal.
De ésta manera, otra careta macrista se cae en Berisso y el empleado Municipal pasa de ser un «vago» a ser un «ejemplo» de amor hacia la ciudad.