Los trabajadores Municipales de Berisso sufren el destrato más grande que se pueda tener, ya no solo a la hora de hablar de persecuciones y malos tratos, sino también cuando se habla de condiciones denigrantes en sus lugares de servicio.
Las denuncias sobre techos rotos, falta de material, falta de limpieza, caños tapados, cloacas desbordadas, falta de ropa, vehículos rotos, etc, etc, se han vuelto un hecho común dentro del Municipio, pero la insólita situación que se vive en la sección de archivos, donde trabajan, en su mayoría mujeres, es una demostración cabal del descuido y destrato del Intendente JORGE NEDELA, hacia aquellos que sostienen el funcionamiento del Estado Municipal.
Lejos de las condiciones mínimas necesarias de trabajo regidas en cualquier convenio, las trabajadoras del sector NO PUEDEN IR AL BAÑO PORQUE NO TIENE PUERTA, apenas si una cortina semejante transparente cubre el acceso al pequeño sanitario, indigno de cualquier sector del Estado.
Sin tener a quien recurrir, las mujeres del sector pasan horas aguantando las «ganas» o bien teniendo que pedir permiso para usar otro baño o simplemente «custodiandose mutuamente» para no sufrir percances vergonzosos.
Sin plata para una puerta de chapa de apenas unos 60 centímetros, pero con dinero para gastar en campañas nacionales que superan los 8 millones de pesos, NEDELA mira para otro lado, no solo para no incomodar a las trabajadoras, sino para ignorar la situación, que da pleno ejemplo de lo mala que ha sido la gestión macrista al mando de un Municipio que fundieron y degradaron hasta llegar a ser la burla nacional, con Escuelas fantasmas, plazas millonarias, cooperativas amigas y ahora La puerta inexistente de un baño de damas.