Un recelo familiar se traslada a la violencia y se resuelve a los tiros. Así fue el dramático episodio ocurrido este domingo en Berisso.
Un menor de 17 años quedó demorado acusado de dispararle con un arma de fuego a su cuñado. El disparo le rozó el pecho y por centímetros salvó su vida.
Todo ocurrió en la zona de 7 entre 140 y 141 y según el herido refirió ante las autoridades; había discutido minutos antes con su cuñado y que este le había disparado, huyendo de la escena poco después. Lo cierto es que con las características físicas y de vestimenta, los agentes salieron a buscarlo, dando con él a las pocas cuadras.