En la mañana de hoy, el Presidente de la Nación, Ingeniero Mauricio Macri, visitó la planta Y-TEC, asentada en la Ciudad de Berisso, acompañado por varios de sus Ministros y por la Gobernadora de la Provincia de Buenos Aires, Maria Eugenia Vidal, quienes envueltos en un inmenso operativo de seguridad que se ocupó de mantener alejado a la gente, paseo por las Instalaciones del Laboratorio inaugurado hace cinco años por la entonces Presidenta, Cristina Fernandez de Kirchner.
La visita «relámpago» del mandatario estuvo seguida, muy de cerca, por los máximos popes del Ejecutivo Municipal encabezado por el Intendente Jorge Nedela, así dispuestos, se los vio sonrientes y exaltados al Secretario de Finanzas, Alberto Amiel, quien tuvo su oportunidad de «cholulear» con «Mauricio» a quien le recordó cuando le regaló un cuadro de la Bombonera, mirada desde el cielo «hace muchos años» dijo un sonriente Amiel, que en el día de mañana, deberá pagar las horas extras de los trabajadores Municipales. Otro que estuvo al pie del cañón, casi como si fuera a ver a un «Rokstar», fue al Jefe de Gabinete, «Cacho» Mendez, quien no paraba de bromear con su ladero, el Secretario de Obras y Servicios Públicos, Raúl Murgia.
En su corta estadía, Macri, recorrió la Planta y dio un corto discurso (ver aparte) para luego salir raudamente de la Ciudad dejando entre poco y nada tras de si, salvo algunos funcionarios y varios trabajadores de la Planta, evidentemente confundidos entre la realidad que les toca vivir y el discurso de los funcionarios.
Un tibio Jorge Nedela fue abordado por los periodistas con algunas preguntas de rigor, ante las que manifestó su alegría por la visita Presidencial, sintiéndose incomodo ante el requerimiento de una colega que le preguntara sobre los despidos del Estado para con los científicos y el apoyo que dice Macri darle a ese sector; «Creo que el compromiso lo demostró apoyando a un proyecto que viene de la otra gestión…»,para luego deshacerse en alagos para con la decisión de dejar en su puesto al Ministro Lino Barañao; «eso lo engrandece como político» aseguró el Intendente.
Lejos quedaron los actos públicos para los presidentes, las visitas con contenido e inauguración o anunció de obras. Lejos quedó la visión del Mandatario rodeado de «su pueblo», lejos quedaron las preguntas y las ruedas de prensa, Berisso vivió un «hola y adiós», en una visita que no dejó nada.