La temporada 2021-2022, de verano, en La Balandra, se encamina para ser una de las peores en la historia de la Ciudad de Berisso, arrancando con polémicas y terminando aún peor.
Con decisiones incomprensibles por parte del Intendente Municipal, Fabián Cagliardi, la temporada en el Balneario más fomoso y tradicional de la Ciudad, va camino a quedar en la historia como un desastre turístico monumental.
A un portón con candado que cierra a las 19 horas y «echa», literalmente, a los vecinos que disfrutan de la playa porque no se puede acampar en La Balandra por la Pandemia del Covid, Pandemia que el municipio cree que solo está en ese balneario ya que en el resto de las Playas ésto no sucede, se le fueron sumando otras desacertadas circunstancias.
Como si ya el escándalo fuera poco, inmediatamente el Intendente ordenó que se tirara abajo un puesto de Guardavidas, un puesto histórico alegando que a ese lugar de la playa no iba la gente, argumento totalmente falaz que llevó a la propia Provincia a meterse, aunque el Intendente nunca les hizo caso.
A ésto se le sumó la interminable y constante pelea con los Guardavidas, que fue ganando en virulencia, en dónde se denunciaron amenazas y «aprietes» al Sindicato que representa a los trabajadores, lo que derivó en denuncias, medidas de fuerza y hasta la intervención del Ministerio de Trabajo.
Pero en medio de ésto hoy los vecinos y lugareños denuncian otra situación; «Los baños de la playa LA BALANDRA, PLAYA MODELO, la que Cagliardi dice que refaccionó con un plan que dijo la Secretaria de Gobierno que trabajaron muchas áreas con ella a la cabeza y en conjunto, hoy son la postal del abandono» dijo un comerciante.
Los pastizales, las roturas, la falta de higiene, son parte del panorama que se ve y que viven, tanto los vecinos, como los trabajadores.