Sin dudas, la música es una de las expresiones artísticas más hermosas que podemos disfrutar, ya sea desde la interpretación o desde su escucha. Sea como sea, resulta muy difícil imaginar la vida sin ella, y por eso hoy le rendimos tributo y homenaje por todas las emociones que nos transmite.
Cada 22 de noviembre se celebra el Día Mundial de la Música, y la protagonista de su origen es Santa Cecilia, quien fue perseguida por sus creencias cristianas y posteriormente decapitada por cantar una alabanza a Dios.
A fines del segundo siglo después de Cristo, cuando la religión católica aún no era aceptada en el Imperio Romano, esta joven devota llamada Cecilia fue obligada por sus padres a casarse con otro joven de la misma sociedad patricia: Valeriano, quien al poco tiempo adoptó la religión de su esposa.
Valeriano junto a su hermano, Tiburcio, se encomendaron a la labor prohibida de sepultar cadáveres cristianos, por lo que fueron arrestados, torturados y condenados a muerte.
Luego, las autoridades fueron por Cecilia y le pidieron que renunciara a la religión de Cristo, pero ella confesó que prefería morir antes que renegar de su religión, entonces fue trasladada hasta un horno caliente para que la sofocación y los gases terminaran de ablandarla.
Pese a ese martirio, Cecilia cantó alabanzas a Dios y fue condenada a muerte. El 22 de noviembre del año 230, el alcalde romano Almaquio ordenó que le cortaran la cabeza. Orden que se cumplió.
En 1594, el Papa Gregorio XIII nombró a Cecilia como patrona de todos los músicos. Desde entonces, y en su honor, todos los 22 de noviembre se celebra el Día de la Música.
En varias obras de arte se muestra a Santa Cecilia rodeada de instrumentos musicales. Esto se debe a que, según dicen los antiguos escritos, la mujer cantó internamente a Dios mientras los músicos de su boda interpretaban canciones paganas.
Ya sea en la religión o fuera de ella, la música es un medio de expresión que tenemos todos los seres humanos para lograr generar vínculos y conectarnos con otras personas, y también expresar eso que a veces sólo se transmite con una melodía.
¿Qué hace la música en nosotros?
Ayuda a canalizar las emociones.
La música escuchada se guarda en áreas del cerebro diferentes a las de los recuerdos, por eso las personas con Alzheimer son capaces de recordar melodías de su pasado.
Disminuye el estrés.
Puede servir para meditar.
Ayuda a un mejor desarrollo del cerebro.
Facilitadora del sueño: la música de baja frecuencia puede ayudar a la persona a relajarse y obtener un buen descanso.
Después de todos estos beneficios y todos los que falta, podemos decir que todos los efectos de la música son buenos. No tenés más excusas para vivir un día sin ella