En medio de un creciente malestar en el Gran La Plata por la falta de agua en las canillas, Axel Kicillof no tuvo más remedio que apurar la designación de un titular de Aguas Bonaerenses SA.
Quien ocupará el sillón en la empresa operadora de agua potable es Germán Ciucci, un experto en cuestiones hídricas que se desempeña en el ministerio de Infraestructura y responde al subsecretario de Recursos Hídricos de la Provincia, Guillermo Jelinski.
Así, Kicillof vuelve a elegir a un hombre de su entorno y descarta la posibilidad de que los intendentes accedan cargos de la segunda línea de gobierno. Hasta ahora, sólo se mantiene en pie el desembarco de Omar Galdurralde en Lotería.
Según pudo saber LPO, Ciucci desembarcará el viernes en la empresa acompañado por Jelinski que asumirá como vicepresidente ad honorem. En tanto, quedarán dos directores que vienen de la gestión anterior y uno designado por el Sindicato de Obras Sanitarias (Sosba). Con eso tendrán una estructura hasta tanto el Gobernador decida conformar el directorio definitivo.
LPO había adelantado ayer que, en medio de serios problemas van desde agua turbia hasta el corte total del servicio, Kicillof se negaba a aceptar las renuncias de los funcionarios de Vidal. Así, Rafael Sardella, la autoridad designada por María Eugenia Vidal en 2016 apenas si aceptaba firmar los expedientes mínimos para sostener el servicio.
Por en los últimos días, las altas temperaturas resientieron un servicio ya de por sí en crisis. Los problemas van desde agua turbia hasta el corte total del servicio. La presión de agua cayó en algunos puntos de la capital provincial luego de que se rompiera una bomba ubicada en el bosque de la ciudad. Sin autoridades nuevas, nadie en la empresa quiere disponer de los fondos para cambiarla.
Absa es una empresa pública de gestión compartida. El gobierno tiene el 90% y los trabajadores el 10% controlado por el poderoso Sindicato Obras Sanitarias (Sosba).
Los números publicados en su sitio web permiten dimensionar la estructura de la empresa. Es la encargada de brindar un servicio básico en 79 localidades y 52 municipios de la provincia, y cuenta con cerca de 800.000 usuarios.
El problema en el Gran La Plata es preocupante. La región requiere, al menos, que se bombeen a la red 30.000 metros cúbicos de agua por día, pero la planta Donato Gerardi de Punta Lara -que abastece a La Plata, Berisso y Ensenada- solo es capaz de producir 12.000.
En tanto, en una entrevista con LPO, el ministro de Infraestructura, Agustín Simone, explicó que el estado de las cañerías de la ciudad genera una pérdida de alrededor del 50%.
Días atrás el gobierno avanzó con reuniones con el embajador de Kuwait en Argentina para reflotar un crédito que la provincia venía negociando con el Fondo Kuwatí de Desarrollo y que había sido paralizado.
El proyecto es la construcción de una nueva planta potabilizadora para La Plata, Berisso y Ensenada que reemplace a la vieja planta Donato Gerardi que está sobrepasada en vida útil en unos 25 años. A esa planta se le sumará un nuevo acueducto.
El proyecto requiere una inversión total de U$S 211 millones de los cuales unos 50 millones deberían llegar de Kuwait y que serán destinados al acueducto. En tanto, otros 119 deberían llegar del Banco de Desarrollo de América Latina para la planta potabilizadora. El resto lo aportará el gobierno de la provincia.
Con el mal servicio que brinda ABSA,siguen cobrando tarifas que no tienen nada que ver con el servicio que brindan,tendrían que devolver algo de eso al usuario.