Vaibhav Bedi, un habitante Ruso, afirma que durante siete años ha usado los productos de la marca Axe, los cuales afirman en sus campañas publicitarias que “atraen mujeres”.
Bedi finalmente exigió una indemnización millonaria por los daños psicológicos que esto le ha causado y por una profunda depresión en la que se encuentra.
De ser efectiva la demanda de éste hombre, cuestión que es poco probable, una avalancha de usuarios podrían exigir una retribución semejante y hacer que la empresa de productos para hombres quiebre rápidamente.