La carrera hacia las elecciones 2023 ya está en marcha y el intendente, Fabian Cagliardi, lejos de mostrar gestión, está inundado la ciudad de carteles, intentando tapar la campaña de su adversaria directa.
Con un uso indiscriminado de personal tercerizados y vehículo del Municipio, en las últimas horas, la campaña del oficialismo entro en etapa crítica, luego de conocerse una nueva baja en los recientes números que miden la intención de votos del Intendente Cagliardi, los cuales siguen bajando ante la falta de gestión que se observa en la ciudad.
Lejos de las reuniones multitudinarias y de las caminatas por los barrios, el Jefe comunal apuesta a los paredones, pancartas y la frase «Para seguir creciendo», que dicho sea de paso se contrapone con los dichos de su Secretaria de Gobierno, Aldana Iovanovic, quien sostiene que Berisso está en «vísperas de crecimiento».
Con obras sin terminar por doquier, inseguridad, comida en mal estado, ocultamiento de información pública, Nepotismo y un alejamiento notorio de la realidad, Cagliardi y sus funcionarios más cercanos buscan impedir el crecimiento de sus rivales, más que actuar para revertir la escasa imágen positiva.
En definitiva, MÁS CARTELES, MENOS OBRAS, una idea que no parece buena, sobre todo cuando además muestra la intolerancia que tiene cuando alguien no piensa igual que «el Jefe».