«CASA POR CASA DE NOCHE Hoy recorrí junto a militantes y precandidatos de Unión por la Patria , la zona centro de nuestra ciudad, y pudimos apreciar el cambio radical que implicó la colocación de las nuevas luminarias LED» comienza diciendo el posteo realizado por el Intendente Fabián Cagliardi en sus redes sociales.
Y eso bastó para que cientos de vecinos se sintieran molestos e indignados con el mandatario que sigue cayendo en los números, de cara al próximo domingo.
Mientras el Jefe comunal posteaba; «Queremos que cada vecino y vecina de Berisso nos acompañe a seguir construyendo unidos la ciudad que soñamos» vecinos de la ciudad, le contestaban; «Fabián vení de noche a 126 y 77 a media cuadra de la comisaría,por esta parte de villa progreso no andas,vení un ratito nomás, jajajaja».
Otra vecina expresó; «El único lugar que gestiona es el centro y hasta ahí nomás porque la verdad Berisso está abandonado y ahora está sacando las máquinas camiones que encima son prestados solo lo hace por las elecciones está dando manotazos de ahogado»
«Señor Intendente Fabián Cagliardi es lamentable que haga propaganda política por el solo echo de haber cambiado lámparas, por lo menos lo podrían hacer completo por qué hay lugares que la luminaria que no funcionaba la dejaron así, cómo todo lo que haces a MEDIAS.
SON UN DESASTRE» dice otro mientras otra frentista acota; «Jajaj siempre todo lo que se ve no? Centro, Génova . Lo más vistos… Ejemplo al barrio santa cruz lo tenés re olvidadooooooo».
Obviamente la gente de los barrios es la más enojada, por ejemplo; «Si venís x la 18 “Fortín Gaucho “donde tiraron la mugre tené cuidado de no caerte en el pozo que es un peligro xq vienen todos los nenes de la 18 a tomar el micro para ir al colegio … caminan bastante cerca de dónde mandaste a hacer una cancha y tenía dueño el terreno !!!! Hasta pasaste las máquinas y rellenaste con tierra !!!» O «Veni si tenes tiempo de noche a recorrer Villa Paula.Calles que dan asco,zanjas tapadas,falta iluminación..Berisso no sólo es el centro!!!».
De noche y en el centro, una campaña que asusta a los popes de arriba que no ven crecimiento y sufren la perdida de votos.