Esta mañana quedó frustrada una audiencia porque la OMIC no tenía recursos para notificar a una de las partes
El Distrito que conduce Jorge Nedela, cada vez se parece más al país que en la ficción comandaba Alberto Olmedo, llamado » Costa Pobre». El corrimiento del estado sobre sus funciones básicas es de una gravedad inusitada. So pretexto de no tener fondos suficientes muchas dependencias están virtualmente paralizadas.
La persona damnificada busco respuesta a una situación particular en la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) que regentea la abogada Fernanda Biasi desde el año pasado. Esta dependencia municipal ,según figura en la página oficial, tiene por objetivo recepcionar las denuncias efectuadas por los consumidores sobre diferentes servicios y la ejecución de las audiencias correspondientes.
El caso se trata de un reclamo ante la empresa ORÍGENES (seguros de retiros) por incumplimiento de contrato. Al llegar a la audiencia pactada por la OMIC, el letrado de la demandante se encontró que no había nadie en representación de la aseguradora. Fue allí que se le informo que no pudieron notificar por falta de sistema y no contaban con los recursos económicos para enviar una carta documento.
La increíble situación prosiguió, cuando personal de dicha oficina le ofreció al abogado entregarle en mano la cédula de notificación para que el mismo la lleve a la sede de ORÍGENES. La oficina de la empresa de seguros de retiro está ubicada en la avenida Corrientes N° 1174 piso 5 CABA.
El intendente Nedela quien junto a sus funcionarios tienen los sueldos más altos de la provincia, no pueden dar recursos básicos a los trabajadores municipales para desempeñar su tarea. Inspectores de tránsito que no tienen talonarios para multas. Oficinas que realizan actas con máquinas de escribir del año 70 por no tener tinta en la impresora. Delegaciones y concejo deliberante enganchados de la luz. Un gimnasio municipal que robaba el gas de red, etc . Son una clara muestra que la conducción del municipio les quedo grande.
