El Gobierno bonaerense renovó las advertencias sobre la presencia de cianobacterias en lagunas y ríos de la provincia de Buenos Aires, y explicó cuál es su procedencia y por qué pueden a llegar a ser tóxicas.
La directora de Monitoreo Hídrico bonaerense, Paula Ramírez, enumeró las restricciones dictadas para evitar entrar en contacto con estos microorganismos.
En ese sentido, manifestó que las cianobacterias presentes en ríos y lagunas bonaerenses “son organismos milenarios que permitieron que hoy tengamos el aire que respiramos”. No obstante, señaló que “el problema es que, cuando empiezan a reproducirse en demasía, reflejan un desequilibrio en el ecosistema o en sus condiciones y pueden llegar a ser tóxicas”.
Por lo tanto, aclaró que, “si entramos en contacto con el agua o con la arena donde ha habido cianobacterias, nos puede trasmitir una toxina a través de las mucosas, los ojos o la ingesta de agua o algún otro organismo que estuvo en contacto con ellas”. Por ese motivo “hay restricciones para la pesca y evitar los contactos con los deportes acuáticos”.
Ramírez apuntó que “las precauciones que damos son no ingresar al agua dependiendo del color. Para eso tenemos un cianosemáforo que está conformado por los 4 colores que están en sintonía con los que se utilizan a nivel internacional para determinar riesgos”.