La inflación de julio, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), fue del 1,9%, lo que eleva la suba acumulada en lo que va del año a 17,9%. Este dato se distancia de las mediciones de otros organismos, como el Instituto de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires (Idecba) y el Instituto de Estadística de los Trabajadores (UMET).
Disparidad en las mediciones
Mientras el INDEC informaba su cifra, la Ciudad de Buenos Aires ya había publicado su propio índice, que se ubicó en 2,5% para el mismo período. La inflación acumulada en la Ciudad en los primeros siete meses del año fue del 18,1%, con una variación interanual del 40,9%.
Esta diferencia en las mediciones se atribuye a la distinta ponderación de los servicios, que han experimentado un aumento significativo durante la actual gestión de gobierno. La inflación de la Ciudad, que ha estado consistentemente por encima de la del INDEC desde diciembre de 2023, ha provocado una pérdida aún mayor del poder adquisitivo de los salarios.
Los principales aumentos en la Ciudad se dieron en:
- Restaurantes y hoteles (+5,3%), impulsado por las tarifas de alojamiento y precios en restaurantes.
- Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (+2,3%), debido a las actualizaciones en alquileres y gastos comunes.
- Transporte (+3,6%), con alzas en pasajes aéreos, combustibles y el boleto de colectivo.
- Alimentos y bebidas no alcohólicas (+1,8%), con incrementos en verduras, carnes, pan y cereales.
- Recreación y cultura (+3,6%), por el aumento en paquetes turísticos.
Por su parte, el Instituto de Estadística de los Trabajadores (UMET) y el Centro para la Concertación y el Desarrollo (CDD) registraron un aumento del 2%, lo que marca una leve aceleración respecto al 1,8% de junio. Según este informe, la inflación acumulada en el año es del 16,3%, aunque advierten que el reciente salto cambiario podría presionar al alza el índice en los próximos meses.
Alimentos y salarios, los más afectados
El informe de la UMET destacó un fuerte aumento en el rubro de Alimentos y bebidas no alcohólicas (+1,9%), que según el exministro de Educación, Nicolás Trotta, «más que triplicó» la variación de junio. Trotta advirtió que este es solo el efecto inicial de la devaluación de julio y que tendrá repercusiones en agosto.
Además, señaló que, a pesar de la reducción inflacionaria desde principios de 2024, los salarios reales registrados siguen siendo un 5,5% inferiores a los de noviembre de 2023. La inflación del 2% registrada por la UMET también refleja la temporada de vacaciones de invierno, con aumentos en los rubros de Restaurantes y hoteles, Recreación y cultura, y Transporte. Por el contrario, el rubro de Prendas de vestir y calzado fue el único que registró una baja (-1,4%) debido al fin de temporada y la apertura de importaciones.