La empresa EDELAP, concesionaria del servicio de energía eléctrica, ha dejado a la ciudad de Berisso en la oscuridad y la indignación. Anoche, mientras cientos de vecinos se manifestaban pacíficamente por los cortes de energía que afectan a amplias zonas, la compañía se negó a restablecer el servicio, exigiendo condiciones inaceptables para que su personal acudiera a reparar las fallas.
Según trascendió, EDELAP, una empresa con un largo historial de quejas por su deficiente servicio, condicionó su intervención a la ausencia total de manifestaciones y de vecinos en las zonas afectadas. Esta exigencia resulta particularmente indignante dado el carácter completamente pacífico de las protestas. En cada uno de los puntos de reclamo, la presencia de efectivos policiales, jefes de seguridad y hasta del propio Secretario de Seguridad, Federico Ruiz, dialogando de manera serena con los ciudadanos, garantizaba un entorno seguro que desmiente cualquier justificación para la postura de la empresa. En este contexto, la negativa de EDELAP a solucionar los problemas de suministro eléctrico se percibe como un abandono flagrante de sus responsabilidades.
La situación se agrava con la percibida pasividad de las autoridades locales. El Intendente Fabián Cagliardi ha sido señalado por su aparente desinterés en el drama que viven los vecinos, priorizando, según denuncian, su campaña electoral. Del mismo modo, los concejales también han sido criticados por distanciarse de su rol de representantes de los ciudadanos, especialmente de aquellos que más sufren las consecuencias de la falta de luz.
Mientras tanto, miles de hogares en Berisso permanecen sin energía eléctrica, lidiando con las consecuencias de un servicio deficiente y una empresa que parece haber dado la espalda a sus usuarios. La paciencia de los vecinos se agota, y la pregunta en el aire es: ¿Hasta cuándo EDELAP seguirá ignorando la emergencia, y cuándo las autoridades locales asumirán su compromiso con los berissenses?