El fútbol no acompañó al gran escenario que protagonizó el partido. Bajo el sol de Ciudad Evita, y en un campo de juego que estuvo en condiciones impecables, Fénix y Villa San Carlos quedaron a mano en un encuentro que no tuvo ningún tipo de emoción.
Un empate que no le sirve a ninguno. Mucho menos a San Carlos, que pelea mano a mano con Villa Dálmine por no descender a la Primera C, y esta tarde no demostró ningún argumento para llevarse los tres puntos. El Cuervo tampoco hizo mucho, pero, por lo menos, corre con mayor margen en la pelea.
Un encuentro chato, poco vistoso y escaso de ocasiones de gol. Predominó el pelotazo largo antes que la elaboración de combinaciones, y se buscó jugar esperando el fallo del rival en lugar de explotar la impronta propia. Y así fueron pasando los minutos: pelota de un lado a otro, impresiciones y errores que hicieron que ninguno merezca el triunfo.
De esta forma, tanto Fénix como Villa San Carlos sumaron un punto, pero que no los ayuda en las aspiraciones de cada uno. Los de Cisneros alcanzaron las 13 unidades y no pudieron acercarse a los puestos altos. Por su parte, los de Ochandorena llegaron a los 12 puntos y siguen sin despegarse del fondo de la tabla anual.