La carrera hacia las elecciones legislativas del 2025, ya se lanzó y hay algunos que en su nerviosismo por seguir «perteneciendo a la CASTA», empiezan a hacer «cualquier cosa» contar de mantenerse en la cresta de una ola política devaluada.
Asi lo muestra la desesperación de un grupo de ediles «opositores» que a modo de gacetilla, mandaron su repudio y montaron un «circo» en las puertas del Concejo Deliberante de Berisso, enojados por el asueto municipal dado por el cumpleaños de la ciudad.
«En el marco de un nuevo aniversario de la fundación de Berisso, el Honorable Concejo Deliberante cerró sus puertas una vez más: si bien era un asueto local, debería ser para los empleados municipales, pero de ninguna manera para funcionarios y concejales que frente a tanta desidia en la ciudad deberían estar a pie del cañón» escribieron en una gacetilla firmada por los ediles; Aguilera (libertaria), Marc Llanos (PRO), Maximiliano Fernández y Mariana Astorga (multi partidarios, hoy con bloque propio tratando de armar coalisión)
Vale señalar que los ediles sesionaron en los últimos años un promedio menor a una vez por mes, que cobran sueldos que rondan los dos millones de pesos y que de los nombrados anteriormente hay dos (Marc Llanos y Astorga) que ya estan por cumplir su periodo y que en los años anteriores, jamas se quejaron por el «asueto» municipal.
Atro párrafo interesante en la gacetilla es el siguiente; «Casi como en señal de protesta, varios concejales de la oposición decidieron salir a escuchar a los vecinos». Y uno se pregunta¿No debería ser normal que un edil salga a escuchar a los vecinos? ¿Como que lo hicieron a modo de protesta?.
Pero lo que parece incomprensible tiene un motivo, «se termina el periodo de mandato y hay que buscar lista» y es así como, Astorga y Marc Llanos, quienes ingresaron por el «macrismo» hoy se ven relegados e intentan llamar la atención ;»si a nosotros nos cierran las puertas y no podemos recibir a los berissenses nos vamos a los barrios o laburamos en la vereda del Concejo», escribieron y uno se vuelve a hacer preguntas; ¿No es la calle y los barrios el lugar natural de un político y más aún de un concejal? ¿Que hicieron en estos cuatro años? ¿Dónde estuvieron?.
Evidentemente falta el pan en la mesa de los vecinos, pero el CIRCO sobra.